Esto el blockchain lo soluciona.
Estoy de coña (la ironía no suele funcionar muy bien por aquí :). Este problema se ha intentado solucionar con tecnología muchas veces (el que lo consiga se forra). Podemos hacer maravillas para rastrear documentos electrónicos y verificar si son verdaderos o no, pero verificar el enlace entre el objeto real y la etiqueta electrónica es muy complicado. Cualquiera puede cambiar las etiquetas de los productos físicos. Este problema lo tienen todos los productores de productos físicos. Es un marrón.
#15 El problema es que no funciona. Pasa lo que dice #22. Podemos tener una trazabilidad en las etiquetas genial pero nada impide que alguien quite una etiqueta buena y la ponga sobre un producto que no lo es. Las etiquetas físicas se pueden incluso falsificar (se falsifican desde pegatinas de denominación de origen de vinos a cuerdas para jamones ibéricos). Con blockchain esto no pasa pero el problema final sigue existiendo: ¿Cómo asocio un certificado de calidad (físico o digital) a un producto físico de manera fiable?