#3 Han sido años y años invirtiendo horas y horas y horas de prime time, tanto en radio como en televisión, para ocultar bajo un tsunami de blanqueante una ideología aberrante, despreciable, miserable, repugnante y que va directamente al lado más cruento, oscuro, vil y turbio del ser humano. El nuevo neofascismo disfrazado de una libertad prostituida
Y aún así tenemos que aguantar día si y dia tb que el ascenso de la ultraderecha es culpa de la izquierda y de los wokes.
Han sido años y años invirtiendo horas y horas y horas de prime time, tanto en radio como en televisión, para ocultar bajo un tsunami de blanqueante una ideología aberrante, despreciable, miserable, repugnante y que va directamente al lado más cruento, oscuro, vil y turbio del ser humano. El nuevo neofascismo disfrazado de una libertad prostituida.
La libertad para joderte vivo, quedarme tan pancho y luego regodearme, despreciable ser humano inferior, en tu sufrimiento. Por eso se lleva tan bien con el neoliberalismo que hace de Mili en este tándem de Pili y Mili. Porque el neoliberalismo ve de puta madre como el trabajo de las milicias fascistas le hacen el trabajo de desbrozo de dinamitar toda regulación para que luego ellos tengan su libertad de vampirizar y saquear el sistema a límites que ni podemos imaginar.
Volviendo al lado humanista del problema. Hay que ser muy hijpoputa para interiorizar profundamente esta idelología, pero el caso es que hay como un 10% de irreductibles
monstruos"seres humanos" que están pletóricos fantaseando con fusilar a 25 millones de compatriotas si pudieran.Si por ellos fuera, el reguero de cadáveres que estercolan nuestras cunetas desde el 36 iba a quedar en un simple juego de niños, tal es la mala entraña de estas monstruosas bestias.
Dentro de ese bestiario hay grados. Los peores son los activos. Los que de buena gana volverían a asir una automática o un fusil de asalto si fuera necesario y montar una buena orgía de ruidos de balas, olor picante a pólvora, sangre recién vertida y cadáveres en posturas extrañas. Esos no llegarían ni a un 1% de la población. Pero luego estarían los pasivos y ahí es donde aquellos estarían completamente legitimados en sus salvajadas y crímenes por la omisión del porcentaje restante que vería con buenos ojos cómo le hacen el trabajo sucio. No hay porque mancharse las manos si tienes a un puto asesino que te va a facilitar el trabajo de descarte.
Y en eso estamos. Y ahora quédate en tu casa tocándote los huevos mientras los ultras cada vez dan un pasito más y le dejas una autopista para que se monte una buena noche de cristales rotos.