Todos sabemos lo que pasa cuando entre el productor y el consumidor se introduce un intermediario. No vale la pena extenderse aquí. La cuestión es que en nuestro sistema político, no hay un sólo cargo de poder real que sea elegido directamente, sin intermediarios, por el pueblo soberano. Y es para desconfiar.
Pasamos lista:
-Rey: es rey porque sí, no lo elige nadie y su poder es más bien discutible.
-Presidente del Gobierno. No lo eligen los ciudadanos, sino el Parlamento, compuesto pro diputados, que sí son elegidos. Intermediarios.
-Presidente de la Comunidad Autónoma: No lo eligen los ciudadanos, sino los diputados regionales. Intermediarios.
-Presidente de la diputación: no lo eligen los ciudadanos, sino los concejales de la provincia. Intermediarios.
-Alcalde: No lo eligen los ciudadanos, sino los concejales. Intermediarios.
A ver... ¿Tenemos la posibilidad de elegir a alguien sin que los partidos políticos, las oligarquías y otros poderes puedan manipular las listas, los nombres que salen en ellas y los acuerdos posteriores.
La respuesta es que NO.
Y en economía es ley: cuando se introducen intermediarios, estos acaparan el poder, exprimiendo a la vez a productores y a consumidores, como pasa con las grandes cadenas de supermercados o con otros sectores. Nuestro sistema está pensado para que la gente con ideas no llegue al pueblo, y el pueblo no pueda hacer valer sus opiniones. De ahí la estructura basada en el intermediario.
Lo demás son pamplinas.
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Bola extra: en las aldeas del Norte, el pueblo reunido en "concejo" sí elige directamente al presidente de la Junta Vecinal, que se responsabiliza de todo y da la cara ante sus vecinos. A veces pienso que por eso las quieren disolver.
Comentarios
Supongo que hay varias formas de verlo, pero en mi opinión, un sistema de elección directa se vuelve menos eficiente cuanto más compleja sea la sociedad a gestionar. En el ejemplo que pones al final, probablemente lo más eficiente es la elección directa. Pero si en lugar de una junta de vecinos, hablamos de una sociedad hipercompleja e hiperdiversa, compuesta por cientos de miles o millones de personas, pues lo mismo lo más eficiente es elegir a representantes que además, tengan una organización detrás para poder lidiar con los problemas de una forma más eficiente.
Por otro lado, en un sistema de representación creo que es más fácil que se representen los intereses de la mayoría, en lugar de la de unos pocos.
#1 Puedo entender lo que dices para el poder legislativo, pero no para el ejecutivo. Y tampoco para los ayuntamientos menores de un tamaño determinado, siguiendo tu razonamiento. EEUU es un país bastante complejo y la gente elige al Presidente. Francia igual. Y no es que yo sea partidario del sistema presidencialista, peor lo que tenemos aquí no me parece que obedezca a la complejidad, sino al deseo de los partidos de mantener el control por encima de los deseos de la gente.
#1 #2
En mi comentario #4 afirmo que nuestro sistema no es democrático, sino partitocrático (no digo nada nuevo). Muchos de los problemas inherentes a nuestra "supuesta democracia" provienen de esto mismo: la corrupción como consecuencia de la toma de las instituciones del estado por los partidos, la utilización de estas mismas instituciones para la supervivencia del partido y no para el objetivo de su creación, el más cutre y vergonzante partidismo electoralista, la incapacidad y la escasa voluntad en llegar a acuerdos de estado a medio y largo plazo, el dominio que los poderes fácticos y la élites demuestran tener sobre los partidos (y por tanto sobre las instituciones del estado), la falta de interés en cumplir los programas electorales, el interés de los propios políticos elegidos por sólo atender a lo que el partido les pide en vez de a lo que los ciudadanos les demandan (en eso les va el puesto), la elección de cargos "a dedo", ... todo nace de lo mismo: de un sistema diseñado para que el poder de los partidos (que a su vez tienen poco poder sin financiación, y esta depende de "otros") sea sobredimensionado; el voto del ciudadano no está orientado a otra cosa que a fortalecer las estructuras de poder representadas por los partidos políticos.
Los partidos políticos eligen a los jueces del Tribunal Constitucional, a los miembros del Consejo General del Poder Judicial, a los jueces del Tribunal de Cuentas, a los consejos de administraciones de las cajas, a los rectores de universidades, callan y compran a intelectuales, etc...
Esto mismo pasa en mayor o menos medida en cualquier democracia occidental, si bien tal vez en España la falta de resortes que hagan contrapeso lo hace más grave.
Creo recordar que hace pocas semanas el CIS informó de que una de las mayores (creo que la segunda) preocupación de los españoles eran lo políticos, ¿habéis visto a algún partido que se haya preocupado realmente de tratar este grave asunto? Yo no, pero luego, cuando llegue el día que la desafección a los políticos y a los partidos nos lleve a algo peor seguro que nos acordaremos.
Maroto tiene todo el derecho de dejar fuera al representante votado por los segovianos y ahahahaha, sorry no puedo ni terminar la frase.
Disfruten lo votado, seguro que Maroto mira lo mejor para su tierra....
#0 Bienvenido a la partitocracia, este sistema disfrazado de falsa democracia...
#4 Por cierto que tuve después de escribir el anterior comentario la duda de si lo correcto en castellano era "partitocracia" o "partidocracia" y ninguna de las dos acepciones aparecen en el diccionario de la R.A.E.