Mira la foto: la política ultraconservadora se puso un vestido y un sombrero tradicionales mexicanos e intentó hacer una broma sobre el cuadro que llevaba. Dice… “Palabra mexicana del día: JUICY. Dime si viene Juicy Ice”… un juego cuestionable con la pronunciación con acento español de “see”. Y para completar el disfraz, su novio, corredor de bienes raíces, estaba junto a ella, vestido con orgullo como un agente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas o ICE