Prohíbo a los mercaderes alabar demasiado sus mercaderías.
Porque se convierten pronto en pedagogos y te enseñan como fin lo que por esencia es un medio, y al engañarte así cerca del camino que seguir te degradan; porque si su música es vulgar te fabrican, para vendértela, un alma vulgar. Así pues, está bien que los objetos sean fundados para servir a los hombres; sería monstruoso que los hombres fueran fundados para servir de caja de residuos a los objetos.
Ciudadela. Antoine de Saint Exupery
Comentarios
Es una cita muy interesante. Concentra en pocas palabras la enunciación del fetichismo de la mercancía y la alienación del trabajo.
#1 Seres humanos "diseñados" o manipulados para que sean compradores compulsivos.
#2 Más aún:
Seres humanos degradados a mercancías que fabrican y compran otras mercancías.
Sirva este ejemplo:
¿A cuánto está la unidad de camarero? Su alquiler son unos 900€ mensuales, más de 8 horas al día. Bien, importa poco que el camarero sea un humano, lo que importa es que produzca beneficio. Igualmente, importa que el dinero que obtiene retorne nuevamente a su arrendatario o a otros comerciantes. El camarero solo es una mercancía intermedia más de la cadena, como los vasos que lleva, la cafetera, los conductores de camiones de suministros, las mesas, las sillas, etc.
#3 Es triste pero tienes razón... También es verdad que el trabajo (en parte) se basa en la "compra" de la actividad de una persona, normalmente mecánica, como un pequeño robot (con neuronas, sí)... Ojalá encontráramos alguna manera de solucionar ese problema... en algún relato (ciencia ficción) propuse, lancé algunas ideas... pero la gran mayoría de ellas me quedaron flojas, sin peso específico... pero... ojalá alguien en elgún momento encuentre la respuesta.