Imaginad que en los 60 Walt Disney crea unos robots para animar sus parques de atracciones. Que estos robots dan pie a otros para ayudar a los seres humanos. Que sus condiciones son cada vez peores, derivando en esclavitud al tiempo que toman conciencia de sí mismos y deciden rebelarse en los 90. Imaginad una guerra mundial de humanos contra robots que acaba davastando todo, con ellos destruidos o recluidos en campos de concentración, con una gran corporación dominando el mundo y unos valientes dispuestos a luchar contra ella. Vamos al lío...
|
etiquetas: cine , crítica , estado , eléctrico , ciencia-ficción