Pongámonos en situación: estás en una librería decente, echando un vistazo, dispuesto a comprarte un libro con el que te solazarte repantingado en el sofá, o cuando menos, adornar la estantería de manera que cada vez que pases la mirada sobre ella puedas pensar “algún día tengo que leerme esto”. No tienes ninguna idea preconcebida; ni hay nuevo libro de Ken Follet (si no le gusta Ken Follet, puede, querido lector, pensar en su autor de bestsellers favorito) Tampoco recuerdas alguna reseña del Babelia o del Qué leer que te haga buscar un...
|
etiquetas: libros , editores , librerias , edición