El presidente de Estados Unidos está convencido de que ha vuelto a ganar a Trump y que ha revalidado su mandato en la Casa Blanca. Sorprendido porque las elecciones se hayan celebrado de madrugada, Biden se ha mostrado eufórico por los brillantes resultados de los laboristas. Mientras tanto, uno a uno, sus asesores de mayor confianza se han esforzado por hacerle entender que Estados Unidos ya no pertenece a Inglaterra y que, precisamente, lo que se estaba celebrando el cuatro de julio es la independencia sobre ese país.