Se encontró en 1981 en el abrigo de Entrefoces, Asturias. No existen paralelos a esta figura en el Magdaleniense cantábrico. En su publicación, se menciona su posible relación con otras representaciones humanas magdalenienses en la zona pirenaica que trazan tocados/peinados o rasgos de la cara (como la cabeza de Roc-aux-Sorciers), así como con figuras gravetienses (como la Venus XV de Dolní Věstonice, la Venus de Brassempouy y la «cabeza negroide» de Grimaldi).
Comentarios
Saben que era magdaleniense porque lloraba como una magdalena
Ya me voy, ya he cumplido el cupo para toda la semana por lo menos