Hace 5 años | Por --595012-- a teknoplof.com
Publicado hace 5 años por --595012-- a teknoplof.com

En el último año de la década setentera del siglo pasado, la compañía estadounidense Milton Bradley (MB) lanzó al mercado juguetero un vehículo programable de aspecto lunar llamado Bigtrak. Tenía seis ruedas —con tracción sólo a dos de ellas—, una luz azul frontal al más puro estilo de un cañón de fotones y un teclado de membrana superior con el que se podían programar hasta 16 órdenes secuenciales que se ejecutaban por lotes una detrás de otra: avanzar, girar, retroceder, disparar, etcétera.

Comentarios

D

Me acuerdo .... de haberlo querido pero nanay

Caresth

#1 Y yo. Me lo sustituyeron por el Trailer de Gozán. Un juguete buenísimo, pero siempre me quedó la espinita del otro.

PauMarí

#2 #1 pues yo lo tuve... Y aprendí Logo con poquísimos años.

gontxa

#1 #2 #4 Yo también... pero siempre me quedé con ganas de que me regalaran el remolque. Era una pasada de juguete.

Ed_Hunter

#1 Mis primos lo tenían, molaba... los primeros 20 minutos. Cuándo ya habías recorrido el pasillo dos veces, y sin que te dejaran "explorar" más, lo aparcabas en un rincón a esperar a que se jodiesen las pilas.

reithor

#6 Depende del rodapié, que hay construcciones por ahí muy precarias...

reithor

Bigtrack, destrozando los rodapiés de todos los pasillos.

gontxa

#3 Qué va... no tenía la velocidad ni la fuerza para rallar un rodapié.