Se me acerca una persona a mi mesa. Acababa de atender a un matrimonio marroquí que acababa de llegar y había ciertos problemas con su documentación. Como había oído la conversación, me lanza una mirada de complicidad y me dice:
- ¿Qué, ya están pidiendo paguitas?
Puse cara de póker y le pregunté qué quería.
-¡Es que este mes no me ha entrado el subsidio de mayores de 52 años!
La ironía revoloteó por el despacho pero, sin encontrar sitio donde aterrizar, salió por la puerta.
El cecopi reunido y Mazón, en Murcia de fiesta.
Se me acerca una persona a mi mesa. Acababa de atender a un matrimonio marroquí que acababa de llegar y había ciertos problemas con su documentación. Como había oído la conversación, me lanza una mirada de complicidad y me dice:
- ¿Qué, ya están pidiendo paguitas?
Puse cara de póker y le pregunté qué quería.
-¡Es que este mes no me ha entrado el subsidio de mayores de 52 años!
La ironía revoloteó por el despacho pero, sin encontrar sitio donde aterrizar, salió por la puerta.