#3 Pues sí. Albertito se te pone a hablar catalán en círculos cerrados como Aznar con tal de gobernar. Y vagascal con tal de trincar para su fundación y trincar sillón, también.
#2 La competencia en gestión de emergencias es del gobierno autonómico.
Debe haber algo confuso y oscuro en esa afirmación que los que tenemos el cerebro lavado por Menéame no alcanzamos a ver.
Mazón culiando en el ventorro y llegando al Cecopi a las tantas con la peste a vino, pero espera, que el que abandonó a los valencianos fue el gobierno central.
#5 En la última campaña electoral Frijolito hizo lo posible (incluso lo imposible si es que eso es posible) para fastidiarlo todo, aún teniéndolo todo de cara. La decisión del partido fue apartarlo de la campaña y esconderlo bajo una piedra pero el daño estaba ya hecho. Rajoy era un experto en no hacer absolutamente nada y no le fue mal asi.
Esa misma mosca aparece de la nada cuando tienes que hacer tus cosillas en el campo. Usted se está cagando vivo. Aún no lo sabe, pero las Calliphoridae, sí.
Después de muchas experiencias con bici y perros, y un "tatuaje" en el tobillo de una de esas experiencias (salió mal), algunos consejos:
- Si el ataque es inminente, háblale fuerte y con autoridad. No es gritarle como un loco, es decir "NO", "PARA" o algo así con mucha autoridad, como si regañaras a un niño. Se suelen parar en seco. Los tacos también funcionan y suelen salir de forma muy natural en esas situaciones. Recuerda que no quieres amenazar al perro: voz grave, fuerte, pero lo más tranquila posible (dadas las circunstancias).
- Para y baja de la bici. A no ser que veas muy muy claro que puedes escapar rápido (cuesta abajo), para y baja. Los perros persiguen a lo que se mueve rápido y las bicis los vuelven especialmente locos. Y los perros corren muuuucho y tardan muuuucho en cansarse. Creedme, lo he probado alguna vez.
- La bici entre tú y el perro, y si ves que va para ti, repite el paso 1.
- Si hablar no funciona, agacharte y hacer como que cojes una piedra (si la cojes de verdad no está de más tampoco) también suele funcionar. Ojo al agacharte, la bici delante y mucho cuidado con no ponerle la cara a tiro. En algunos foros la gente comentaba que les echaba agua del bidón en el hocico. No se qué opinaran los expertos, pero yo no lo recomiendo.
- Una vez que tienes la situación un poco controlada, te vas yendo muy despacio, sin darle nunca la espalda y con la bici siempre entre el perro y tú.
Este video de Bikecanine (adiestrador de perros que recorre el mundo en bici) es muy ilustrativo - www.youtube.com/watch?v=1CN9Rte77Gc . Si os fijáis en todos los ataques del video, lo que siempre le funciona es hablar fuerte para contener el ataque de primeras.
Si tenéis curiosidad, la vez que me mordió un perro cometí el fallo de no leer bien la situación; pase al lado de un perro que empezó a ladrarme pero no vi que viniera para mi, asi que no paré y tiré para alante. Como el perro dejó de ladrar, pues no le di más importancia. Cuando quise darme cuenta, lo llevaba enganchado del tobillo. No se llevó el trozo por muy poco. Si un perro que ladra es peligroso, uno que no ladra te va a morder seguro.