#49 Cuando "entregas" tu vida a una creencia (cualquiera), dejas de asumir responsabilidades que desplazas a esas creencias: lo hacen todas las religiones. Infantilizan y según sus "reglas" tienes que aceptar que determinados comportamientos frente a ciertos acontecimientos de tu vida están regidos por ese "ser superior". Entre ellos el ámbito de la vida privada, que se ve restringido, limitado y hasta prohibir aspectos. También está el tema de alcanzar un espíritu crítico. Si eres capaz de cuestionar y criticar esas creencias, también tendrás capacidad para ampliar tu nivel intelectual (cursando estudios superiores, por ejemplo; aunque no es una condición sine qua non). Si no has llegado a desarrollar ese espíritu crítico, porque esas normas te inculcan el miedo, la culpa y la dependencia, te comportarás como ellos, los de arriba, te obliguen. Esos de arriba, que seguramente no tendrán que asumir ninguna de sus reglas, vivirán en la opulencia con el sacrosanto lema de "Haz lo que yo te diga pero no hagas lo que yo hago".
#21 Me estaba acordando de un artículo de El comidista del año pasado, creo, sobre sopas asiáticas de peor a mejor.
Bien, pues yo, que soy de probar (casi) todo, me pedí por amz un surtido de las tres mejores. Y bueno, para una primera vez, dices, ok, no está mal, pero joder, madremía, madremía las picantes hacían que se me salieran las lágrimas y todo.