A mi me contaron que los pilotos de otros aviones, hartos del tema, pedían , cuando lo oian por radio, que declarasen alerta de combistible o se esperaden como los demás.
Según dicen los controladores les daban prioridad para evitarse disgustos hasta que un día, cansados del tema, enviaron inspectores a revisar el nivel de combustible y no había problema alguno, con lo que pasaron a exigir, formalmente, que si había algún problema declarasen alerta de combustible y entonces sí que tendrían preferencia, pero despues habrían de justificar la escasez.
Me has recordado está frase de “Mercaderes del espacio”: cuando una persona arruga la naríz y pone mala cara al oler una publicidad del “antes” de un desodorante.
Todavía nos queda algo de margen para la distopia, aunque tampoco mucho.
Ya no es su “viuda”, nunca lo fue.