#46 El debate no es “o bomberos o toros”. Los presupuestos no funcionan como un único bote del que se quita una cosa para poner otra sin más; cada partida se aprueba con un fin concreto y, en muchas ocasiones, proviene de fondos que no podrían destinarse automáticamente a otros servicios.
La tauromaquia, guste o no, mueve economía en Castilla y León: ganaderías, veterinarios, transportistas, hostelería, feriantes, artesanos… En muchas fiestas patronales es el eje que atrae visitantes y hace que se llenen bares, alojamientos y comercios y dan vida a pueblos totalmente muertos el resto del año. Quitarla no solo es eliminar una tradición de siglos, también es reducir ingresos a centenares de pequeños negocios de pueblos donde ya cuesta que haya actividad económica.
Y se puede perfectamente invertir en mejorar medios contra incendios y reforzar bomberos sin eliminar las subvenciones a espectáculos taurinos. La clave está en exigir que se cumpla con ambos objetivos y se gestione bien: proteger a las personas y su patrimonio, y mantener vivas las tradiciones que sostienen la vida social y económica de miles de municipios de la región.
#10 Vamos, los hijos ya tienen canas en los huevos pero la culpa es de la madre, porque los hijos (tres tíos y una tía) son tontos. Y luego dicen que las feministas se hacen las víctimas. Pues no te han visto a ti lloriquear...
#2 Teniendo en cuenta que lo mató su hijo que era un HOMBRE, es gracioso que al final siempre encontréis la manera de echarle la culpa a las mujeres, pero no es misoginia. Nooooo, que vaaaaa
jajajaja es que eres mu tonto, joder. Un tío asesina a golpes a su padre y sales tú con "el FemiNiiiiIiiIiIIssSsMooOOooOh" jaja aún te pasa poco, hostia. Madura.
La tauromaquia, guste o no, mueve economía en Castilla y León: ganaderías, veterinarios, transportistas, hostelería, feriantes, artesanos… En muchas fiestas patronales es el eje que atrae visitantes y hace que se llenen bares, alojamientos y comercios y dan vida a pueblos totalmente muertos el resto del año. Quitarla no solo es eliminar una tradición de siglos, también es reducir ingresos a centenares de pequeños negocios de pueblos donde ya cuesta que haya actividad económica.
Y se puede perfectamente invertir en mejorar medios contra incendios y reforzar bomberos sin eliminar las subvenciones a espectáculos taurinos. La clave está en exigir que se cumpla con ambos objetivos y se gestione bien: proteger a las personas y su patrimonio, y mantener vivas las tradiciones que sostienen la vida social y económica de miles de municipios de la región.
Supongo que tu razonamiento te posiciona como misándrico ¿No?