#4 Yo tuve la gran suerte de que en el curro en el que estaba en el momento me dieron no solo los días oficiales sino tantos como me quise tomar e incluso al retomar el curro, si a media jornada me pasaba esa "falta de aire" podía irme sin dar más explicaciones (nunca dejé el trabajo a medias, al menos me aseguraba de dejarlo encaminado o revisarlo en casa en cuanto sentía un poco de fuerzas). AL final deje ese trabajo, pero mis ex jefes siguen siendo unos buenos amigos.
A mí me echaron de un trabajo justo a los dos días de fallecer la persona probablemente más importante de mi vida. No era capaz de dar tres pasos seguidos sin tener que pararme a coger aire.
En realidad me hizo un favor, odiaba ese trabajo, pero ya me hubiera gustado tener diez días de tregua para empezar a ser consciente de la mierda de mundo que tenía delante de mi.
En realidad me hizo un favor, odiaba ese trabajo, pero ya me hubiera gustado tener diez días de tregua para empezar a ser consciente de la mierda de mundo que tenía delante de mi.