Friederike Otto, climatóloga que se promociona como propagandista de la religión climática. Los climatólogos que la refutan, que son la mayoría, jamás tendrán voz en este panfleto sesgado lleno de fanáticos.
#6 O se defiende el derecho de quitarles el pito y, si sus padres se oponen o le intentan convencer de que no lo haga, es delito y les quitan la custodia. Al sistema se llama tiranía sanchista de la secta woke. Me pasé toda mí juventud peleando con la educación religiosa y fui un comecuras, pero los delirios de la secta de las ministras de hoy y su religión de estado me parece una distopía cien veces peor.
#10 La hacienda de Montero es mucho mejor que la de Montoro. Por lo menos esta hace ricos a unos cuantos que no tenían donde caerse muertos antes de entrar en la mafia socialista. Osea, crea riqueza donde no la había.
#6 Qué alegriá me da comprobar que la secta woke no es capaz de acabar con el sentido común de los españoles. A ver si nos vamos librando de esta gentuza de una vez.
#4 Es cosa de la propaganda. Tampoco ningún científico estudioso del comportamiento sexual, como Kinsey, había oído hablar del género hace 25 años y ahora todo el mundo da por hecho que existen más de cincuenta y que te puedes inventar uno para ti solo y los demás nos lo tenemos que comer.
#72 Hostia! Hora y veinte viendo a este gilipollas. Que no digo que no tenga razón, ojo. Pero que alguien me haga un resumen, porque cinco minutos ya son más de lo que puedo aguntar este tono sin devolver.
#1 Aquí, como siempre, se permite insultar con las palabras más soeces a un juez, lo que por cierto es un delito de injurias, pero no ninguna crítica razonada a los delincuentes que aquí no se mencionan nunca porque están en el poder.