En el S XXI hay recursos suficientes para que los ancianos y el resto de ciudadanos de un país lleven una vida digna. Otra cosa es que se quieran mercantilizar los servicios básicos y hacer fracasar a la seguridad social para potenciar los seguros médicos y planes de pensiones.
Al político que diga lo contrario hay que mandarlo de una hostia a su casa.
¿ Tú no?