Gurbanguly Berdymukhamedov gobernó Turkmenistán entre 2007 y 2022, cuando cedió el poder a su hijo Serdar. No está acostumbrado a que sus órdenes no se cumplan. Antes de abdicar ordenó cegar el cráter de las puertas del infierno, cosa que, tres años después aún no ha sucedido. La razón por la que el dictador ha querido cegar uno de los atractivos turísticos del país tiene que ver con la historia del fenómeno. En 1971, el cráter se abrió por un error de los geólogos soviéticos que buscaban gas metano en la zona.
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Es uno de los yacimientos de gas más grande del mundo y cada día pierde dinero