Teñía la tarde de cadmio y melón el gotelé de mi viejo dormitorio donde había pasado los principios de mi vida. Las partículas de polvo, participio absoluto de existir, nevaban pianissimo sobre el desgastado escritorio de caoba que reposaba en una esquina.
La voz de mi madre, que me llamaba Capitán, el abrazo de mi padre, que me llamaba con prudencia, se habían marchado años atrás para dejar paso a un ensordecedor silencio que se interrumpía con los quejidos del colchón donde descansaba ahora mi cuerpo.
No estaba muerto, no. Pero casi.
Había llegado la noche anterior en una inusual conexión directa de Praga-Oporto. Mientras el avión atravesaba las nubes, se dejaba entrever un interminable desfile de colinas verde petróleo; más gris que verde, más negro que gris. Poco hay en esta tierra más melancólico que el occidente peninsular. Y, en ese momento, decidí morir.
Veinte pastillas de sibutramina, mi ceremonial café con leche, Old Man de Neil Young.
Por lo que sea, no morí y seguí mi vida con normalidad. Yo creo que fue Dios que me rechazó cansado de tantos clichés.
Comentarios
#3 La ketamina no pero los hongos sí y no les veo ninguna ventaja. Encima tengo que echarme crema en los pies cada mañana
#4
Te juro por mi vida que lo último que quiero es ser borde porque respeto mucho este tema. Yo misma he pensado alguna vez fríamente en medio de alguno de mis frecuentes periodos de ansiedad paralizante seguidos de depresión, terminar de una vez con todo. Solo una cosa... ¿de verdad conoces tan poco de medicamentos que pensabas morir por una sobre dosis de sibutramina? Yo no soy sanitaria, pero sí paciente experta desde hace demasiados años. Desde luego que si decidiese acabar alguna vez con mi vida sería de la manera más dulce posible y eso sería a base de drogas, pero no tendría que salir a buscar camellos para encontrarlas, solo pedírselas a mi psiquiatra y mi médica de cabecera y hacer acopio un par de meses de lo que tomo todos los días.
#1 Eran tiempos de juventud. No es la primera vez que mi ignorancia funciona como virtud. Te diré, eso sí, que suicidarse con drogas hoy en día no es tan rentable. Las benzodiazepinas mucho menos. Suicidarse, per se, no es tan rentable.
#2 Has provado la ketamina o los hongos ? Sonantidepresivos ,