Fernando Grande-Marlaska ya no se sostiene el el Gobierno. Todos lo intuíamos, y lo que publicó ayer El País sobre la tragedia de la frontera de Melilla ocurrida en junio es una contundente acta notarial que no deja lugar a dudas. Las cosas no ocurrieron como Marlaska y el Gobierno han querido hacernos creer, y sólo el hecho de haber mentido a sabiendas es algo más que un error, y debe pagarse con algo más que una reprimenda parlamentaria.
Portada
mis comunidades
otras secciones