Publicado hace 2 meses por Charles_Dexter_Ward a alandalusylahistoria.com

El enfrentamiento entre Castilla y Granada favoreció la adopción entre las tropas cristianas de la monta ecuestre oriental conocida como «a la gineta», llamada a tener gran fortuna en el plano militar, ritual y suntuario castellano a lo largo de los siglos XIV y XV. Dicho cambio anunciaba las novedades que traería consigo la primera mitad del siglo XVI, cuando la expansión de la artillería habría de suponer la decadencia definitiva de la caballería pesada a favor de la caballería ligera

Comentarios

Charles_Dexter_Ward
themarquesito

#1 Procedente de este apunte de Gonzalo Fernández de Oviedo sobre la guardia del príncipe don Juan, de quien fue paje:

Capitan dela guarda
Guarda de halabarderos, ni de estradiotes e gente a cauallo, no la ouo en Castilla en mi tiempo, eçepto, quando el Prinçipe era niño ouo çiertos capitanes e ginetes que andauan en su guarda, como he dicho; e despues del vençimiento dela batalla de Toro, donde el rrey don Alonso de Portugal fue desbaratado por el catholico rrey don Fernando, enla costa del rrio de Duero, estuuo esta Castilla en tanta paz, que avn los moços despuelas del Rey ni del principe don Johan, mi señor, no trahian espadas; e seles mandaron traer despues quel traydor de Juan de Cañamares dio la cuchillada al Rey en Barcelona.

EvilPreacher

Así montaba, en el romance, el Infante Vengador:
Helo, helo, por do viene
el Infante Vengador,
caballero a la gineta
en caballo corredor
su manto revuelto al brazo,
demudada la color,   
y en la su mano derecha   
un venablo cortador.