Willow afirma que era una persona común y corriente cuando ella y su esposo compraron la casa en Vancouver hace 25 años por la modesta suma de unos US$312.000 en el valor actual. Esa misma propiedad ahora vale varios millones. Los jóvenes están especialmente preocupados por la crisis de la vivienda. Emily tuvo que posponer sus estudios dos años para poder trabajar, ya que le costaba pagar la matrícula y el alquiler. Ser propietaria de una vivienda en el futuro, "eso ni siquiera es posible" para la mayoría de las personas de su edad.
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