Edina Pasic, una joven que trabaja para la protectora de animales Harmony Fund, iba conduciendo por una carretera de Sarajevo, Bosnia, cuando de prontó se dio cuenta de que había una perra corriendo entre los coches y los camiones. Edina y su compañero pararon el coche y acudieron a ayudar al animal, que estaba confusa y aterrorizada. Consiguieron acercarse a ella e intentaron calmarla dándole algo de comida. La devoró en pocos segundos, estaba hambrienta.