Morgan, de 60 años, preguntó sin rodeos al famoso misógino sobre sus relaciones íntimas mientras le pinchaba a Fuentes sobre su largo historial de comentarios misóginos, entre los que se incluyen afirmaciones tan extrañas como que «muchas mujeres quieren ser violadas» y que «las mujeres dan asco, hablan demasiado y ya no están buenas».