No continuará

Suena el despertador. Como otros días. O al menos como cinco de los siete días de la semana. Hoy era lunes y es este el momento del día en el que uno más se arrepiente de no haber aprovechado el tiempo durante el fin de semana o de no haber dormido lo suficiente. Y eso es lo que piensa, en este instante, Susana.

Se levanta, se ducha a treinta grados, se cepilla los dientes, se viste y mira el reloj. Aún quedan veinte minutos antes de salir camino al trabajo, diez más de los habituales ¿de dónde ha podido sacar tanta energía esa mañana? No importa, eso no quita que en este momento toca desayunar, mejor no saltarse este paso. Así que se hace un bocadillo de mortadela con mantequilla mientras ve las noticias de Antena 3. ¡Ding, dong! ¿Qué es eso? Desde luego un sonido inhabitual a estas horas. 

"¿Quién es?", dice Susana, pero no obtiene respuesta; "¿Quién me mandaría a tener una puerta sin mirilla? De hoy no pasa", se recuerda Susana. Finalmente se levanta y abre la puerta.

Fin.