El agua que nace del deshielo de la enorme capa de hielo de Groenlandia no se limita a elevar los niveles del mar. Esa fresca descarga de agua dulce crea corrientes ascendentes que llevan nutrientes desde el fondo marino hacia la superficie. Ese proceso, lejos de ser una idea teórica, está respaldado por modelos muy avanzados y por datos satelitales. El resultado: un impulso tangible al crecimiento
del fitoplancton.
www.nasa.gov/earth/nasa-supercomputers-take-on-life-near-greenlands-mo