Los científicos han observado que cuando múltiples embriones de estrellas de mar giran hacia la superficie del agua, gravitan entre sí y se ensamblan espontáneamente en una estructura cristalina sorprendentemente organizada. La formación creada recuerda a la estructura de los panales de abejas. Esta característica podría ser empleada para diseñar enjambres robóticos autoensamblables.