Paleobiólogos de la Universidad de Zúrich han descubierto especímenes excepcionales en Venezuela y Colombia de una tortuga gigante extinta de agua dulce llamada Stupendemys. El caparazón de esta tortuga, que es la más grande jamás conocida, mide entre 2,4 y casi 3 metros. Además, el caparazón de los Stupendemys machos tenía cuernos, una característica rara en las tortugas.