"Ser un niño de barrio obrero abandonado por papá me permitió evitar ese incómodo momento que mis compañeros varones vivieron cuando llegó la edad de darle al balón. A poco que nos haya dado por ojear algún manual sobre comportamiento humano, sabremos que existe bastante consenso en que el desarrollo de nuestras habilidades y del propio comportamiento viene de una mezcla de genes y entorno. Nada nuevo, ya que ese cribado según genética se viene haciendo desde antaño sin necesidad de laboratorios. Salvo excepciones...