Hace 6 años | Por oereat a phys.org
Publicado hace 6 años por oereat a phys.org

El salmón engendrado que muere después de emigrar a su hogar en realidad le hace un favor a su descendencia. El estudio, publicado hoy en Ecology Letters , encontró que al morir, los cuerpos en descomposición del salmón fertilizan la corriente y crean un ambiente que favorece el crecimiento de los peces jóvenes y mantiene su diversidad genética.