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La "antiambición" o cómo encontrar la felicidad en la mediocridad

La "antiambición" o cómo encontrar la felicidad en la mediocridad

Habitamos en una sociedad en la que quien no lucha y está 24/7 enfocado en su labor para superarse y conquistar metas es alguien pasivo, falto de carisma y un fracasado. Nos educan para demostrar nuestra valía y potencial casi a cada instante, lo que puede resultar agotador, y hasta peligroso psicológicamente. Porque a veces en ese intento por demostrar lo que valemos, nos dejamos la piel y hasta la salud. La antiambición es un cambio de perspectiva y la "mediocridad", que tantas connotaciones peyorativas tiene, puede ser una opción más sana.

| etiquetas: antiambición , mediocridad , felicidad
No es mediocridad, es ponerte tus propias metas, y no dejar que te las ponga la sociedad capitalista. Es tener la ambición de ser feliz, en vez de tener la de parecer feliz y exitoso.
Todo esto viene de la visión estúpida de la vida que tienen los americanos.
Esa estupidez de: "eres un fracasado", porque las cosas te van mal.
Hay miles de millones de personas. Siempre van a haber millones de personas mejores que uno en cualquier cosa que hagas.
Hay que buscar ser feliz en la medida de nuestras posibilidades y ser realista en nuestros objetivos.
Hay un momento en q la relación trabajo/responsabilidad respecto al sueldo, no merece la pena.

Por mucho más que te paguen, no sale a cuenta la cantidad de tiempo q inviertes y la responsabidad q asumes.
#5 Hay mucha gente atrapada en un trabajo que no les gusta porque les pagan bien. En nuestra sociedad, parece que el único motivo para cambiar de trabajo es un sueldo más alto, como si todo lo demás no importara. El sueldo es un bien motivador cuando ganas poco, pero si te sobra para vivir como quieres, empieza a perder importancia.
o cómo encontrar la felicidad en la mediocridad

Es esos son expertos los faxtapobres. Ellos, con tal de tener alguien a quien odiar y echarle la culpa, son felices.
#1 Sinceramente creo que la intención del artículo es buena.

Yo, por mi trabajo, me he sentido hasta mal si dejaba pasar un día sin estudiar, como si estuviese perdiendo el tiempo. Si no publico o no voy a congresos no tengo un nombre. Y a lo mejor simplemente me apetece trabajar en lo que me gusta y estudiar lo que me apetece... Sobre todo cuando llegas a ese momento de tu vida en el que puedes empezar a elegir.

Porque a veces me pregunto ¿Cuándo está bien que deje de estudiar? ¿Cuándo puedo…   » ver todo el comentario
#2

¿ansiedad por perder el tiempo o por no tener un cargo o una fortuna de X ceros? Que no es lo mismo.
#2 trabajar más de lo necesario es de tontos.
#10 O de alguien que disfruta su trabajo.
#16 O que no disfruta del resto de su vida. Está claro que cada uno tenemos el equilibrio en un punto distinto, pero si alguien es feliz dedicando toda su vida al trabajo, es porque el resto no le aporta nada y, sinceramente, me resulta muy triste.
CC. #10
#2 pues me siento identificado en bastantes cosas. Mi trabajo me "obliga" a ir investigando y aprendiendo constantemente pero, fue nacer mi hijo y tener que cambiar la mentalidad.

Estudiaba un montón de cosas que al final nunca usaba solo por estar al día, ahora sólo me ciño a atender aquello que necesito realmente y en horario laboral. Solo espero no quedarme atrás con todo lo que está llegando de IA :foreveralone:
Si todo el mundo dejara de tener ambición el sistema revienta al momento
#11 No creo que el problema sea tener ambición, sino que vivimos en una sociedad que ha tergiversado ese término. Parece que las únicas ambiciones válidas son el poder y el dinero. Se puede tener ambición persiguiendo otros objetivos, como el aprendizaje, el tiempo con la familia, etc.
#11 Si todo el mundo dejara de tener necesidad el sistema revienta al momento.
Lamentablemente el mundo no funciona así. En mi trabajo me evalúan cada 3-4 meses. Se espera que siga progresando para promocionar. Sino lo haces pasas a estar en la cuerda floja. El big tech es descarnado
Sólo con la mediocridad que se me cae entre los cojines del sofá cuando veo la tele podría montar una academia para instruir a todos los autoexigentes del espacio Schengen, y llevarlos por la senda sin expectativas del conformismo.
Ya veréis que descojone cuando la inmensa mayoría de la gente se de cuenta que somos, con suerte y por definición, mediocres.
#14 Había una frase... "yo quiero ser especial, como todos los demás".
Cuando tienes una vida de mierda, la mediocridad es un anhelo.
Cuando la supervivencia y la mejora es el objetivo y las herramientas que antes para conseguirla provocan que no se consiga la meta y que se empeore en vez de mejorar hay que buscar otras formas.
Siempre habra quien opine que seguir el camino siempre es mejor que buscar otros, aunque el camino este cortado o lleve a un destino que antes era real y ahora es el infierno.
Hay a quien le sigue sirviendo el camino incluso sin saber cual es el objetivo, sin duda es comodo seguir el cauce del rio y mas ameno, a menos que sea el camino al matadero, justo cuando mas necesitas cosas aseguradas.
El artículo hubiera podido ser un pelín más preciso, que no ambicioso, y mentar la aurea mediocritas griega.
Soy al único que al leer el titular se me ha venido a la mente "El notas" de El gran Lebowski?
La "educación" es doctrina para crear soldaditos obedientes y consumidores sumisos. Dejar de comprar estupideces no significa vivir en la mediocridad. Correr todo el dia en una rueda que se pisa la cola eso si es mediocridad. Mas aun, es estupidez. El mundo que nos vendido es un producto. Una imagen de marketing. Un dream.
"Habitamos en una sociedad en la que quien no lucha y está 24/7 enfocado en su labor para superarse y conquistar metas es alguien pasivo, falto de carisma y un fracasado."

¿Vivimos en la misma sociedad? Se ha normalizado todo lo contrario, hoy en día los pocos gymbros o workaholics que hay lo tienen facilísimo para destacar. Otro tema es que las redes sociales impidan al resto ser felices con su mediocridad, es difícil vivir tranquilo si diariamente te restriegan por la cara el éxito de terceros desde tu smartphone.
Los que promueven la excelencia en el trabajador, son los interesados e que así sea. No digo mucho más, solo que raramente se encuentra la ficidad en el trabajo. Hay que trabajar para vivir, no vivir para trabajar.

menéame