La Exposición Internacional de Osaka de 1970 sirvió de escaparate al triunfante capitalismo japonés, listo para inundar el mercado internacional con transistores y automóviles. Su tasa de crecimiento anual se mantenía en el 5%, lejos del salvaje 10% de los años cincuenta, pero suficientemente alta como para que algunos líderes occidentales dieran la voz de alarma. Richard Nixon declaró en 1971 que la competencia económica que debían enfrentar era «un desafío aún mayor que el de los oscuros días de Pearl Harbor».
Comentarios
Para comprender el capitalismo japonés es necesario liberarse de la mirada exótica, que esencializa las diferencias culturales al tiempo que oscurece el hecho de que los procesos sociopolíticos de cualquier lugar del mundo son, en lo esencial, bastante similares.
Magnífico corolario para un gran artículo.
al orientalismo español le cuesta admitir que un japonés pueda ser una persona a secas: ha de instituir un compendio de tradiciones milenarias
En general, en todas las sociedades, se da el fenómeno de considerar a cada uno de "los otros" meros avatares de los prejuicios y estereotipos que conforman la imagen con la que se percibe el grupo al que se asignan. Un fenómeno cuya intensidad e imprecisión son directamente proporcionales a la ignorancia de quien lo manifiesta.
#1 Si en "occidente" (toma ya) hemos conseguido idealizar en cierta manera a la mafia japonesa (ladrones, extorsionadores, secuestradores, asesinos...), qué no haremos con ver a los herreros milenarios de Sony martilleando el acero al rojo para fabricar teléfonos móviles en Shenzhen.
#7 ¿Shenzhen no está en China?
#13 Y en la zona guapa, nada menos.
#1 toda la razón, y muy bien explicado. Ese absurdo pensamiento es uno de los pilares del racismo.
#1 el truco d ls japos en lo que llaman "innovacion constante" :
osea a cada vez que se les ocurre algo
lo remiran mucho antes d sacarlo
y si sacan algo mejorado
ya estan estudiando en equipo teorico como mejorarlo
junto cn una potentisima I+D
#1 Pero es que eso pasa en todos lados. Luego vas allí y para ello lo exótico y milenario es Europa
La gente tiene sus ideas instauradas. Luego, accedes a su cultura popular y, de alguna manera, comprendes que luchan en contra de ese estereotipo que les han colgado.
Siempre hay un rebelde, un individuo individual que lucha en contra de la imposición del grupo; siempre hay alguien que llama la atención, uno que prefiere atender a las necesidades de todos antes que a las necesidades del grupo al que pertenece... idealistas, soñadores, luchadores... visionarios. La gente les trata como idiotas, como personas sin importancia, como gente problemática; hasta el momento en el que esa diferencia es lo que ayuda al grupo, a todos los grupos.
Cuando uno lee sus novelas, lee sus mangas, ve sus animes o juega a los videojuegos que han creado allá, ciertamente, se nota ese aire de tradicionalidad pero no en el sentido de "sigue este camino" sino en un sentido más parecido al "siente orgullo de tu cultura" y nada más.
¿Cuándo vemos religión en sus historias? Cuando hay una boda o un funeral. Fuera de eso, vuelven a su vida normal a pensar en sus propios asuntos.
¿Cuándo vemos obediencia al grupo? En todas las historias, pero siempre indicando que hay un camino diferente. El machismo y la "humildad" japonesa no van a desaparecer de un día para otro; pero eso es algo que se refleja en sus ficciones.
¿Vemos algún deseo para el futuro? Yo creo que sí, aunque sea a nivel de intencionalidad. Comprenden el peso de la sociedad por completo, comprenden su función, pero no pueden perdonar el secuestro de la libertad individual, el secuestro del futuro a los más jóvenes.
Últimamente, estoy jugando a Persona 5. Todo el grupo que reunes durante el juego, todos ellos son rebeldes, parias, problemáticos... ellos intentaron jugar según las normas para darse cuenta de que hay un segundo nivel de normas que no podían controlar, ni evitar ni soportar. Que había gente que podía decidir su futuro con una simple mala mirada.
Y eso, creo, dice mucho acerca de cuál es el deseo, la intención, que se quiere instaurar para un futuro no tan lejano.
O puede que yo sólo sea un friki que sobre entiende cosas que no están ahí, pero bueno, eso ya es cosa vuestra para considerar
#2 Gracias por compartir esta reflexión
#2 También tenemos la historia de Battle Royale, que justamente trata sobre como el "tradicionalismo" se quiere imponer a las nuevas corrientes. ¿Que la juventud pasa de obedecer las normas que siempre han existido? ¿Que sube el paro? Pues nada, los secuestramos y que se maten entre ellos. Así hacemos una criba de los problemáticos y solo quedan los que agachan la cabeza.
#4 Pero Battle Royale no deja de ser una distopía, no creo en absoluto que sea fruto de una tendencia social, si acaso una crítica exagerada a lo que pudiera llegar a ser la sociedad de seguir con ciertas tendencias, eso te lo concedo. La película hace del salvajismo su bandera y escandalizó a no pocos espectadores en su día. Sin ir más lejos, las deserciones en el cine en que la estrenaron fueron múltiples. No creo que represente Japón.
Me gusta la "desmitificación" del artículo sobre las visiones de lo exótico que parece que impidieran ver lo que hay detrás. Y más cuando se apunta a las relaciones económicas que como tales tienen una base material, cosa que obviamente va a pesar más que supuestos exotismos y espiritualidades de corte oriental.
Creo que si acaso con Japón sucede que, siendo una cultura "autosuficiente", hay muchas pequeñas variaciones que a veces resultan chocantes. Me llama últimamente mucho la atención un doble aspecto: Que por un lado parece no llegarles la ola de politicorrectismo norteamericano en sus producciones culturales, pero al mismo tiempo se atreven a tratar temas realmente peliagudos (incesto, transexualidad, homosexualidad, etc) de formas más atrevidas y a la vez "naturales" de lo que lo hacemos aquí.
Por otro lado lo que me ha dejado el artículo es con ganas de ver la peli esta:
https://en.wikipedia.org/wiki/United_Red_Army_(film)
A mí me congratula que haya gente que empiece a desmitificar Japón. En muchos aspectos siempre ha sido un país de mier***, y siempre me sorprende que a veces se critique tanto el capitalismo americano y se pase por alto al japonés, que nunca ha sido un país que haya ayudado a hacer un mundo mejor.
Y siempre digo, me gusta mucho ese país, pero la mistificación que se ha hecho en Occidente de esa cultura no ha ayudado nada a entender el país.
#6 Que por un lado parece no llegarles la ola de politicorrectismo norteamericano en sus producciones culturales, pero al mismo tiempo se atreven a tratar temas realmente peliagudos (incesto, transexualidad, homosexualidad, etc) de formas más atrevidas y a la vez "naturales" de lo que lo hacemos aquí.
No te confundas, ellos también tienen su policorrectismo. No se permiten críticas al emperador ni a su casa, de temas sociales no se habla, o cualquier cosa que huela a no-japonés no arraiga en el país (con excepciones, como la moda K-Pop).
Y en temas sexuales, a pesar de ser un país firmante de los tratados de la UNO en cuanto a abusos a menores, se lo pasan por el arco del triunfo. La pedofilia (prostitución de jovencitas/os) está relativamente extendida e institucionalizada en Japón, destroza miles de vidas cada año, pero nadie dice nada.
#9 Bueno, si entendemos así "politicorrectismo", nuestro equivalente sería que no se puede criticar a la Casa Real (la semana pasada teníamos a uno declarando en la Audiencia Nacional por llamar "corrupto mal parido" al Rey emérito), esto es, en cuanto que censura por parte del poder. Por donde iba es en el sentido de que parecen ir a su aire en muchas cosas ignorando corrientes que en occidente se generalizan, tanto para lo bueno como para lo malo.
Pero sí me da esa sensación de que son muy "isleños" (con eso que dices del cerrarse a lo no-japonés) siendo ese el lado malo de la autosuficiencia que les permite ser hasta cierto punto potencia cultural.
También me llamó mucho la atención cuando Rajoy fue de visita, que se lo llevaron a zonas de seudopeligro radiactivo (con un tipo con un contador geiger al lado para controlar), escenificando el típico paripé del presidente extranjero que te demuestra que no pasa nada y que pueden estar tranquilos con Fukushima. Una cutrez política por su parte que no es ajena a los mecanismos de la propaganda en occidente.
#12 Está claro que el poder saca su mano a pasear cuando alguien se sale de la línea dictada. Lo que digo yo es que en Japón el que hubiera llamado "corrupto mal parido" al emperador a lo mejor ni siquiera pasa por la audiencia nacional, y la prensa ni siquiera hubiera informado de lo que le habría pasado a ese hipotético loco. Sí, estoy diciendo que aquí tenemos más garantías que allá.
Imagínate qué clase de gentuza gobierna por allá cuando lees esto: No pasaron muchos años antes de que criminales de guerra convictos, como Nobusuke Kishi, alcanzasen el puesto de Primer Ministro, algo que habría sido impensable en la Alemania de posguerra.
#14 es que allí salvo un breve interregno ha gobernado un único partido desde las primeras elecciones después de la segunda mundial... La democracia allí un paripe para tener contentos a los useños, porque siguen gobernando los mismos de siempre....
#6 Pues ya seria de traca ver a un negro samurai en alguna película, igual que aquí los meten de caballeros medievales en algunas peliculas supuestamente historicas. Por suerte allí tienen mas sentido común y respeto por su historia.
#16 Van a meter a Batman.
Mientras el indicador económico いちごパンツロリコン no les falle, les seguirá yendo bien.
Corea ya les ha superado y China está apunto.Japón todavía huele a años 80.