Uno de los méritos del sueco Andreas Malm es haber abordado en su libro El murciélago y el capital. Coronavirus, cambio climático y guerra social (Errata Naturae, 2020) una de las preguntas más estimulantes de la pandemia: si pudimos parar el mundo por la emergencia sanitaria, ¿por qué no hacerlo ante una emergencia climática? La cuestión no vincula al azar pandemia y crisis ecológica, sino mediante un nexo común: la avidez del mercado. Un mercado global al que se le concede todo y que solo funciona mediante la lógica del máximo beneficio.
Comentarios
Ecoleninismo, curioso.
Eso, junto con que la educación de nuestros hijos es solo la excusa para que los padres puedan ir a trabajar y que si la clase obrera se queda en casa cinco días, se cagan pata abajo, son las tres grandes realidades que nos ha permitido contemplar la pandemía esta.
#2 Encima es una pandemia ultra light.
El cambio climatico va a hacer quedar la peste negra como una epidemia de acne.
#3 Pues te digo que esos conspiranoicos que dicen que los ricos preparan bunkeres de escape no andan desencaminados.
Y ese tipo de planes no es cortoplacista ni cagando.
Porque se quiere seguir con politicas EGOISTAS.
#1 Que quieres que te diga.... no es ser egosita, es ser cortoplacista... Cuando entendamos que si lo hacemos bien, en 20-30 años estaremos todos mejor...