Lo mejor, es que siempre hay esperanzas. Los seres humanos, en ocasiones, no percibimos lo fuerte que podemos ser ante situaciones difíciles, las veces que podemos levantarnos después de caer y dar lecciones de recuperación.
Cuando solo vemos oscuridad, lo importante es saber que más allá, encontraremos luz, porque el ir y venir de circunstancias, el tiempo, es bueno con todos.
Porque esa es la vida, algunos dicen que dura, otros que bella. La realidad, la mía, es que hay que aprender de ella una y otra vez para salir de los momentos duros, y encontrar la belleza en cada minuto.
Aprender de los errores, de los tropiezos, de las situaciones difíciles, pedir perdón cuando nos equivocamos, y esperar a que quienes nos juzgan mal, rectifiquen, son acciones que podemos hacer nosotros, los humanos, y por las que deberíamos vivir siempre agradecidos.
Aceptarnos como somos, y aceptar a los demás, sabiendo que nadie es perfecto, aunque se busque serlo, debe ser otra clase de este mundo.
La esperanza siempre está, solo hay que aferrarse y ver llegar eso que tanto anhelas.