Cada día llegan cientos de inmigrantes a nuestras costas. Todos ellos varones. Si un empresario español, deseara contratar por ejemplo al 50% de trabajadores de cada sexo, no podría. El machismo del mundo musulmán se extiende pues como un virus en la sociedad occidental, contagiándola.
Tampoco sirve la inmigración machista árabe para aumentar la demografía, actualmente castigada con la baja natalidad, por que si entran avalanchas de varones y ni una sola mujer, no ayudará en nada. A lo sumo servirá para crear un desequilibrio en la balanza, haciendo que haya demasiados hombres para pocas mujeres. Eso sin tener en cuenta que un varón árabe goza de tener varias mujeres por cada individuo, considerándolas a todas de su propiedad, incluso llegando a decenas de mujeres para un solo hombre.
Si para proteger a la mujer en nuestra sociedad creamos leyes y ponemos cuotas, debemos tener la valentía suficiente para exigir que las mujeres árabes tengan también su oportunidad de venir al primer mundo. Si la actitud árabe es dejar que las mujeres se pudran en sus países y sirvan como esclavas muriéndose de hambre, mientras los varones tienen la oportunidad de venir al primer mundo para procrear con las mujeres Españolas, también deberían tener el mismo derecho las mujeres árabes de venir al primer mundo a crear una familia con un varón Español, pero aquí prima respetar esas costumbres musulmanas machistas, arcaicas y esclavistas antes que erradicarlas con una buena ley.
Quien se considere feminista y no se de cuenta de esta barbaridad, es que no es realmente feminista y no, no es cosa de "otros países" esto afecta directamente al nuestro y si no lo frenamos pronto, acabará envenenando el progreso que tanto nos ha costado conseguir.
Deberíamos exigir a los gobiernos de los países que nos traen inmigrantes que el 50% sean mujeres y el 50% sean hombres, o de lo contrario devolución en caliente. Ya está bien de denigrar a la mujer y de que el "machito musulmán" se apodere de las oportunidades que les corresponden a las mujeres. Es nuestro país y aquí se protege a las mujeres. Faltan agallas para crear una ley de inmigración que defienda los derechos de la mujer inmigrante y favorezca que ellas también tengan oportunidades.
Estoy hasta la coronilla de ver cientos y cientos de inmigrantes en las vallas de Melilla y Ceuta y absolutamente todos varones. Ni una sola mujer. Pero que puta vergüenza y nosotros, los Españoles, somos cómplices de esto y de que estas mujeres árabes se mueran de hambre en sus países por falta de oportunidades.
Si los árabes no son capaces de ver que la mujer es tan importante como el hombre en la sociedad, los occidentales deberíamos tomar cartas en el asunto a base de legislación potente y valiente en materia de inmigración para prevenir y erradicar esta era de lacra machista musulmana.