Tener miedo al dentista, es mucho más común de lo que puede parecer. Alrededor del 75% de los pacientes experimentan fobia al dentista hasta cierto punto, muchos de los cuales llegan incluso a no ir por ese miedo.
Hay muchas razones por las que las personas desarrollan el miedo al dentista. Desde las duras personalidades del dentista hasta el dolor y las malas experiencias, todo puede afectar desde una edad muy temprana. La mayoría de las fobias comienzan en la niñez, momento en que nuestro cuerpo y mente están aprendiendo sobre los peligros del mundo. Accidentes como un pico que raspa accidentalmente la encía o un dolor inmenso al rellenar una caries a una edad temprana reforzará el miedo al dentista. Esas malas experiencias pueden causarle un trauma y no querer ir más a la clínica dental.
Otras personas no van al dentista porque sienten que no tienen el control. Tener a alguien que acabas de conocer y de quien no sabes mucho que tenga el control total de lo que pasa en tu boca es una experiencia terrible. Los sentimientos de ansiedad a menudo son la razón por la que las personas reprograman su cita con el dentista o la omiten por completo.
Pero dejar de acudir a la clínica dental por una mala experiencia o por miedo es un completo error. La salud bucal está estrechamente relacionada con enfermedades importantes, por lo que es vital que se acuda a una revisión anual al dentista.
De esta forma, si padeces fobia al dentista, ¡habla con tu dentista! Una regla universal a seguir es expresar siempre tus inquietudes y necesidades. Tu dentista en barcelona no es adivino y no puede leer tus pensamientos. Habla con él antes de concertar la visita, muéstrale tu preocupación y tus miedos; él, como buen profesional, sabrá tratarte y ajustará su trabajo para que te sientas más cómodo.