Las mujeres embarazadas representan un grupo etario de riesgo para muchas infecciones como la influenza. Además son un porcentaje de la población importante en México, por ejemplo, en el 2019 se dieron poco más de dos millones de nacimientos.
El embarazo puede implicar riesgos, debido a los cambios fisiológicos que produce en diferentes órganos. Como el aumento en la frecuencia cardiaca, el mayor consumo de oxígeno, la disminución de la capacidad pulmonar (en el especial en los últimos meses del embarazo por compresión), y una alteración en la inmunidad celular.