La Alianza Cero Deforestación, en la que se integran las principales organizaciones ambientales de España, exige al Gobierno que resista las presiones de los grandes intereses empresariales y apruebe sin dilación la ley que frenará la destrucción de los bosques. Cada minuto desaparecen 30 campos de fútbol de bosques en el mundo. Grupos empresariales, con apoyo de varios gobiernos de la UE y países productores de materias primas agropecuarias, intentan debilitar su aplicación, con argumentos de complejidad administrativa o competitividad.