El proceso pasa por fotografiar la llave y la cerradura; gracias a eso se obtiene una imagen bastante parecida a la llave original que puede afinarse un poco en un programa de CAD. La impresión requiere unos 12 minutos en total (hoy en día, probablemente menos). Se recorta con cuidado del plástico de impresión y ¡voilà! La cerradura abre perfectamente.
A partir de ahora ya ni se puede dejar el llavero encima de las mesas, no sea que venga alguien, haga una foto, copie las llaves, y te pegue un palo..., adiós Opel Corsa.
Comentarios
A partir de ahora ya ni se puede dejar el llavero encima de las mesas, no sea que venga alguien, haga una foto, copie las llaves, y te pegue un palo..., adiós Opel Corsa.