El 24 de julio, J.L. Díez, agricultor del municipio de Tortuera (Guadalajara), se dirigía hacia su finca para cosechar el trigo cuando descubrió que varios dedos retráctiles del corte de su cosechadora, junto con las fijaciones, se habían roto. “Llamé al proveedor y me dijeron que no tenían disponibilidad, que tenía que esperar al menos 15 días, pero eso supondría un retraso grave para mi campaña de cosecha” aclara J.L.. La pieza fue diseñada y fabricada en Zaragoza en menos de 5 horas.
Comentarios
Lo que se lleva haciendo toda la vida con el soldador y cuatro hierros.
Ahora le demandanrán por pirateo patentes y todo eso.
Y con un molde en apenas 30 minutos...
Como Manolo, el de la gasolinera, ayudó a que un agricultor no perdiera su cosecha.
Negro futuro para el negocio de los recambios...
La verdad es que el titular no ayuda mucho. El articulo y las posibilidades de esta tecnología son algo mas interesantes.
Saludos
Y si hubiera buenos torneros y fresadores un taller te hacía una metálica en 10 minutos.