Aunque todos sus intentos fueron fallidos, William Samuel Henson y John Stringfellow reunieron el arrojo y la temeridad necesarios para patentar, allá por 1843, el primer coche volador de la historia
Es como cuando ahora alguien plantea-patenta cosas descabelladas que mucha gente se traga, les planteas los problemas que pueden tener que las hacen inviables y te sueltan aquello de: "Eso decían del teléfono"
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Es como cuando ahora alguien plantea-patenta cosas descabelladas que mucha gente se traga, les planteas los problemas que pueden tener que las hacen inviables y te sueltan aquello de: "Eso decían del teléfono"
El de esta película, si
Lo se
Por un segundo me he preguntado para que querrían un coche violador en el siglo XIX.
Tengo que dormir más.