Kirstey Kenney y Harold Craston, tras asistir a un curso para jóvenes emprendedores socialmente responsables, realizaron un proyecto llamado solarbox, que pretende transformar las viejas cabinas telefónicas rojas de Londres, que cayeron en desuso, en cargadores solares para teléfonos móviles.
Comentarios
Da gusto ver tanto ingenio, y bien aprovechado; ojalá aquí fuéramos igual de eficientes...
Di que sí #1