Desde hace años llevo escuchando a mucha gente decir que por ejemplo GIMP es open source, que noseque programa es open source, … y sinceramente quizás esos términos funcionen en un entorno corporativo pero de cara a la gente del movimiento social del software libre caen como una puñalada trapera.
#4 No se trata de generar odio sino concienciación. El software privativo es un instrumento de control del usuario, algo que cuando se comprende hace valorar en su justa medida al software libre, ya que hace imposible tal control.
Estoy de acuerdo con ser un movimiento social, pero en algunos casos se va al extremo.
Mezclar la ideología con la tecnología no necesariamente traerá buenos resultados.
Hay países donde el sabor a izquierda genera crisis -hasta golpes de estado-. Considero que el software libre debe competir por capacidad, no por extremos ideológicos ni por afinidad de consciencia social.
#2 No tienes en cuenta que la tecnología siempre viene mezclada con alguna ideología. Actualmente la ideología aceptada en la tecnología es que tú no puedes ni debes poder averiguar qué hace realmente la tecnología, y averiguarlo o revelarlo es delito.
El Software Libre es simplemente una forma de impedir que la tecnología sea una herramienta de opresión y control. Soluciona un problema, no lo crea.
#5 Eso es cierto. Pero hay cosas que no se podrán evitar en el libre mercado.
Como hace 80 años lo eran las patentes, nadie podía fabricar coches porque alguien tenía la patente. Cuando se liberó, la competencia la define el mercado entre la oferta, la demanda y los gustos del consumidor.
El software libre ya ha roto una brecha al software privativo, ha madurado, ha resuelto el problema de soporte empresarial, ha abierto mercado a muchos. Tarde o temprano, sucederá igual, debe competir con las demandas del consumidor y contra la manipulación política del privativo.
#7 En el libre mercado no se pueden vender productos o servicios con funciones ocultas, perjudiciales o contrarias a lo anunciado, lo que se denominan estafas.
La opacidad del software privativo lo convierte en la única excepción, y nuestra sociedad está plagada de aparatos disfuncionales, traicioneros, que simulan estar averiados u obsoletos para ser sustituidos o reparados, o bien simulan funcionar correctamente mientras producen errores, anomalías, fugas de gases, accidentes y muertes.
Cuando Microsoft decide dar fin a un sistema operativo, millones de ordenadores que funcionan correctamente, así como sus accesorios, impresoras, escáneres han de ir a la basura porque se ha dictaminado el fin de su vida útil. Empresas, universidades, hospitales y administraciones son títeres de este control, renovando parques informáticos enteros según los dictados del gabinete de marketing de las multinacionales y generando residuos tóxicos por toneladas por cada versión de un sistema operativo nuevo que sólo ofrece cambios estéticos.
No hay futuro por ahí, la sociedad tiene derecho a saber qué hacen las máquinas en las que está basando su funcionamiento y la única manera de conseguirlo con garantías es el software libre, no valen las promesas, los juramentos, ni los secretos empresariales.
#9 Para consumo interno me parece bien una filosofía así de extrema.
En lo particular prefiero un punto más equilibrado, como ejemplo Qgis, WordPress, modelos OpenSource con una filosofía de competitividad. ganar/ganar incluido ganancia para el software privativo con el que hay que aprender a convivir.
En la práctica, echarle piedras al software privativo funciona solo en algunos contextos. Vete a algunos países en latinoamérica en empresas privadas u oficinas gubernamentales y será difícil sostener esos extremos en una propuesta técnica.
Comentarios
No es generando odio contra el software privativo que la gente va a amar el software libre. Pienso que en eso hay mucho que educar a la gente todavía.
#4 No se trata de generar odio sino concienciación. El software privativo es un instrumento de control del usuario, algo que cuando se comprende hace valorar en su justa medida al software libre, ya que hace imposible tal control.
#6 Estoy de acuerdo.
El Free como libre y gratis en inglés puede confundirse, en castellano no. Lo que cita de Telegram es un ejemplo típico
Bonus histórico Disparates sobre software libre/c1#c-1
Estoy de acuerdo con ser un movimiento social, pero en algunos casos se va al extremo.
Mezclar la ideología con la tecnología no necesariamente traerá buenos resultados.
Hay países donde el sabor a izquierda genera crisis -hasta golpes de estado-. Considero que el software libre debe competir por capacidad, no por extremos ideológicos ni por afinidad de consciencia social.
Ya lo he visto en varios países de latinoamérica.
#2 Hay países donde el sabor a izquierda genera crisis -hasta golpes de estado-.
¿Lo que?
#2 No tienes en cuenta que la tecnología siempre viene mezclada con alguna ideología. Actualmente la ideología aceptada en la tecnología es que tú no puedes ni debes poder averiguar qué hace realmente la tecnología, y averiguarlo o revelarlo es delito.
El Software Libre es simplemente una forma de impedir que la tecnología sea una herramienta de opresión y control. Soluciona un problema, no lo crea.
#5 Eso es cierto. Pero hay cosas que no se podrán evitar en el libre mercado.
Como hace 80 años lo eran las patentes, nadie podía fabricar coches porque alguien tenía la patente. Cuando se liberó, la competencia la define el mercado entre la oferta, la demanda y los gustos del consumidor.
El software libre ya ha roto una brecha al software privativo, ha madurado, ha resuelto el problema de soporte empresarial, ha abierto mercado a muchos. Tarde o temprano, sucederá igual, debe competir con las demandas del consumidor y contra la manipulación política del privativo.
#7 En el libre mercado no se pueden vender productos o servicios con funciones ocultas, perjudiciales o contrarias a lo anunciado, lo que se denominan estafas.
La opacidad del software privativo lo convierte en la única excepción, y nuestra sociedad está plagada de aparatos disfuncionales, traicioneros, que simulan estar averiados u obsoletos para ser sustituidos o reparados, o bien simulan funcionar correctamente mientras producen errores, anomalías, fugas de gases, accidentes y muertes.
Cuando Microsoft decide dar fin a un sistema operativo, millones de ordenadores que funcionan correctamente, así como sus accesorios, impresoras, escáneres han de ir a la basura porque se ha dictaminado el fin de su vida útil. Empresas, universidades, hospitales y administraciones son títeres de este control, renovando parques informáticos enteros según los dictados del gabinete de marketing de las multinacionales y generando residuos tóxicos por toneladas por cada versión de un sistema operativo nuevo que sólo ofrece cambios estéticos.
No hay futuro por ahí, la sociedad tiene derecho a saber qué hacen las máquinas en las que está basando su funcionamiento y la única manera de conseguirlo con garantías es el software libre, no valen las promesas, los juramentos, ni los secretos empresariales.
#9 Para consumo interno me parece bien una filosofía así de extrema.
En lo particular prefiero un punto más equilibrado, como ejemplo Qgis, WordPress, modelos OpenSource con una filosofía de competitividad.
ganar/ganarincluido ganancia para el software privativo con el que hay que aprender a convivir.En la práctica, echarle piedras al software privativo funciona solo en algunos contextos. Vete a algunos países en latinoamérica en empresas privadas u oficinas gubernamentales y será difícil sostener esos extremos en una propuesta técnica.