En el verano de 2015, un equipo del Hospital Infantil de Boston y la Escuela Médica de Harvard logró restaurar de manera rudimentaria la audición en ratones genéticamente sordos gracias a una terapia génica. Ahora el equipo de investigación de Boston Children reporta un nivel mucho más alto de audición - hasta 25 dBs, el equivalente a un susurro - usando un vector de terapia génica mejorado desarrollado en Massachusetts Eye and Ear. Además también restaura el equilibrio en un modelo de ratón con síndrome de Usher y sin efectos secundarios.
Comentarios
Ahora esos superratones nos recomendarán supervitaminarnos y supermineralizarnos, y además, supercrisperearnos.
Se llama esquizofrenia