El traje de Superflex emplea un conjunto de sensores para aprender el estilo de movimiento del usuario y aporta energía extra de forma segura a cada paso o movimiento (aunque la empresa rehusó confirmar cuánto duran sus baterías). Esto resulta importante porque incluso con la rápida mejora de la computación, las baterías y los motores siguen teniendo un tamaño abultado y una limitada vida útil. El traje Phoenix de 40.000 dólares (unos 35.300 euros) está diseñado para ayudar a alguien totalmente paralizado de cintura para abajo a andar de nuevo.
Comentarios
La naranja mecánica versión fitness.
#1 Sí, pero haz eso mismo con kevlar añadido, lo mejoras y le pones armas..y a saber donde llegará tal industria.
#2 Somos muy distintos, yo había pensado en casco de realidad virtual y activación de puntos erógenos.
Dentro de 30 años se verán por todas partes.