En el siglo XXI, las infografías están en todas partes. En el aula, en el periódico, en informes gubernamentales, estas representaciones visuales concisas de información complicada han cambiado la forma en que imaginamos nuestro mundo. Susan Schulten explora el trabajo pionero de Emma Willard (1787-1870), una educadora feminista cuyos innovadores mapas del tiempo sentaron las bases para las tablas y gráficos de hoy. Cuando Willard comenzó a publicar libros de texto en la década de 1820, sabía que la competencia era feroz, llena de autores que se acusaban mutuamente de plagiar ideas y textos. Para construir su marca, diseñó gráficos de vanguardia que diferenciarían su trabajo y llamarían la atención de los jóvenes.

La cleptomanía es un trastorno mental caracterizado por una tendencia irrefrenable al robo. Muchísimas celebridades han sido señaladas como cleptómanas, desde la actriz Winona Ryder a la cantante Katy Perry, pasando por el jugador de fútbol americano O. J. Simpson. Pero ¿qué pasaría si el cleptómano en cuestión fuera un diplomático? ¿Se puede ser ambas cosas a la vez y que todo salga bien? Pues probablemente no. Este fue el caso del rey de Egipto Faruk I.

El código de vestimenta de la compañía dictaba que los empleados debían llevar camisa y corbata excepto en situaciones donde el periodista cubría una historia que le requería vestir informalmente. Como era un picnic el 4 de julio, y hacía calor, interpreté que no pasaba nada por llevar una camiseta. Llevé orgullosamente mi camiseta de Ranma 1/2; la de chico/chica/panda en la que pone "Viz Video" y "Ranma 1/2" [...] Al volver al trabajo me dijeron que prescindían de mí. Y [el jefe] salió y dijo que la camiseta había sido el factor decisivo.