Hace 14 años | Por Matroski a enexclusiva.com
Publicado hace 14 años por Matroski a enexclusiva.com

La última frontera no es únicamente hielo y desolación, como muchos imaginan. Es un destino delicioso, con paisajes que nos dejan sin aliento, fenómenos naturales cada día más preciados e impresionantes animales. ¿Por qué vale la pena ir y qué no se puede perder una vez allí? Llegar, definitivamente, no es fácil: hay que atravesar todo Norteamérica para arribar a la más distante frontera de Estados Unidos en su extremo noroeste, una distancia de más de 7,000 kilómetros y aproximadamente nueve horas de vuelo, con escalas, desde Panamá.