Hace 14 años | Por reincidente a blogs.publico.es
Publicado hace 14 años por reincidente a blogs.publico.es

Las medidas que está desarrollando el Gobierno del PSOE para afrontar la crisis no solamente son antisociales y contrarias al interés general, sino que están llamadas al fracaso, ya que, en lugar de poner en valor la lucha contra el fraude fiscal –cumpliendo los anuncios de eliminar los paraísos fiscales, recortar los grandes salarios y controlar los grandes beneficios de la banca como medidas para superar el déficit–, opta por otras medidas dirigidas a que los mas débiles paguen el déficit y sufran una salida de la crisis.

Comentarios

P

Las medidas que propone Centella, podrán ser discutibles, pero son razonables. Sin embargo, la falta de medios de comunicación que las trasladen a los ciudadanos hace que no quepa el debate. Sus palabras llegan a muy poca gente.

Centella, y todos los que traten de ofrecer una alternativa distinta de la oficial, deberían centrar sus esfuerzos en conseguir "altavoces", medios de comunicación capaces de divulgar voces discrepantes con el sistema. Una emisora de radio, una revista de amplia tirada, no se ... algo.

Porque lo que es la participación en los grandes medios ya existentes (en su mayoría en manos de grupos de presión) no les va a beneficiar nada.

Los que leemos Público, o menéame, no somos multitud.

En fin ...gracias a Centella por su esfuerzo clarificador.

tocameroque

Es como si tuviéramos los asalariados la culpa de la crisis, cuando no ha sido así. La culpa la tienen los gobiernos que han permitido una especulación inmobiliaria imposible, un endeudamiento público absurdo a causa de la desmembración competencial del Estado en entes más pequeños, con mayor gasto, una permisibilidad con sectores productivos enteros y regiones enteras que han caído en el subvencionalismo y la subsidiariedad, una absurda perpetuación del modelo sol/playa, una globalización galopante, un desperdicio de capital humano enorme en EREs y prejubilaciones, una masificación del fraude, un aplazamiento de una reforma que rompiera con la temporalidad, una caída de los valores humanos del esfuerzo, el trabajo y la constancia, un apoltronamiento de los sindicatos en las tesis de clase del S.XIX, una pérdida de la investigación, la competitividad y la educación de calidad, un envejecimiento de las infraestructuras apoyándo sólo aquéllas rentables políticamente...pero en fín aquí la culpa siempre es de los mismos: tú y yo. Por activa y pasiva.