Puede que Bush adscriba conscientemente "las voces que chillan" a sus críticos públicos, pero el martes reveló que las circunstancias en que las voces más le perturban son de todo punto privadas: "No veo cómo podría volver a casa en Texas y mirarme al espejo y estar orgulloso de lo que he hecho, si hubiera permitido que las voces, las críticas chillonas me hubieran impedido hacer lo que yo creía necesario para proteger a este país."
Comentarios
Diagnóstico: Imbecilidad aguda, complicada con el gusto a matar y falta de humanidad.
Y como pudieron entender su discurso? Aún es complicado comprender el "lenguaje" de los simios.